"Mañana aprobamos la reforma laboral y veréis que va a a ser muy agresiva... Ya verás, ya verás"... "ok, ok".
Son las palabras del esclavo al sirviente, es la postura humillada del sicario al rendir cuentas de su fechoría...
Es Luis de Guindos, Ministro de economía, vendiendo nuestras vidas al mejor postor, en este caso, el comisario europeo del ramo, Olli Rehn.
Son imágenes para los que aún dudan, otra prueba más de que nadie va a recuperar el destino de este país... nadie excepto nosotros.
No hay más... no tengo ánimo para hacerme el gracioso... bastante tengo con seguir pensando que todo cambiará sin dejarnos llevar por la rabia... que nuestras manos alzadas serán suficiente para detener esta atrocidad.
Sí, da tristeza ver al genuflexo rendir cuentas sobre la atroz reforma Laboral.
ResponderEliminarUn dato ilustrativo, en Argentina durante los 90 la puta reforma no funcionó...de hecho, en ningún país...
Sin embargo, siempre hay salida mientras el pueblo se arremangue.
Salud!
Pues creo que se nos empieza a hacer tarde, la cita era para ayer. Ya veremos si damos la talla... quiero confiar, no sabes cuanto.
EliminarQuizá estemos malditos compañero, eso debe de ser... con esa maldición oriental que dice: "Ojalá que vivas tiempos interesantes"
Un abrazo
Yo le veo como el pelota repelente que se acerca al profesor para decirle cuánto ha estudiado y asegurarle que en el examen va a sacar un diez. Rehn, nada impresionado, le mira como diciendo: ya veremos si es como dices.
ResponderEliminarUn caso más para sentir verguenza ajena. Por ver lo positivo, al menos el ridículo, esta vez, lo hacemos sin necesidad de un traductor.
Como llevo un semana en plan zoológico, yo lo veo como un comportamiento casi animal.
EliminarEl sujeto calvo se inclina sobre uno de los jefes de la manada, incluso le ofrece sus cuello al hablar. La alimaña de pelo blanco apenas se gira para escuchar, sabe de su poder, parece satisfecho pero no lo demuestra demasiado. La tensión se masca en el aire, la manada ya acosa su pieza, huele la sangre...
A mi me da la sensación que esto no lo para ni ...nadie.Con estas leyes de despido en mano,los empresarios pueden hacer lo que les salga de las narices. Y a nosotros, vivir el segundo al segundo y esperar que al siguiente segundo no nos presente la carta de despido.Mil besos y suerte!!!!No digo más,porque yo estoy igual que tú de cabreada. Nuestro puesto de trabajo peligra.Llevamos tiempo viendolo y ahora ya llegó la hora del empresario!
ResponderEliminar¿Sabes lo mejor que tiene el tiempo? Que nunca para.
EliminarAsí pues, a la hora de la merienda, seguirá la de la cena, a la hora del empresario, seguirá la del trabajador...
A la hora de los abusos, la de la protesta, a esa la de la reparación... y así hasta que aprendamos a no alimentar a los lobos, hasta que dejemos de poner cara de cordero.
Un beso
Lo peor son las cosas que se dicen de España en el extranjero. En Brasil, Veja, uno de los semanarios más importantes, decía que el problema era que España vivía demasiado bien antes de la crisis. Decían también que se cobraban ¡16 pagas! Añadían que en el comercio los españoles cerraban a las dos y volvían a las cinco y que los únicos que tenían ganas de trabajar eran los chinos. Insinuaban que los españoles no tenían ganas de trabajar, querían ganar mucho y que así no se podía salir de la crisis. En la tele, cada vez que hablan de España aparece una imagen de la cola del paro.
ResponderEliminarEn otra revista, Istoe, se hablaba esta semana del milagro alemán. Un país serio, no como los del sur, venían a decir. Por suerte en El País, esta semana escribieron un artículo muy interesante sobre la cara oculta de Alemania. El 6,5 % de paro se ha conseguido empeorando las condiciones laborales, creando minitrabajos, contratos por horas. Además no tienen salario mínimo porque los empresarios creen que que perjudicaría las contrataciones. Probablemente el ministro agresivo haya tomado como modelo Alemania. Y conviene no olvidar que el buen PIB se debe en gran parte a que exportan mucho, pero son unos tacaños con sus socios pobres, a quienes no compran casi nada. No voy a negar que Alemania tiene muchas cosas admirables, pero si todo el mundo hiciese igual, se les acababa el chollo.
http://economia.elpais.com/economia/2012/02/09/actualidad/1328790777_303626.html
No sabes cuanto te agradezco que me tengas informado de lo que se dice por Brasil acerca de todos estos temas. Es todo un ejemplo de como se trata la información por parte de los medios en todos los países.
EliminarEn cuanto a lo de Alemania te diré que es un ejemplo perfecto de como a menudo nos confundimos al hablar de "los alemanes". No me cansaré de recordar que no hay alemanes ni griegos ni españoles, que eso es el mejor truco para mantenernos en nuestras trincheras mentales. Solo hay dos clases, explotados y explotadores, los de arriba y los de abajo, los que matan y los que mueren.
No hay más etiquetas, arranquemos todas las demás de nuestras cabezas... y el que pretenda lo contrario, no es sino un cómplice de toda esta locura.
Gracias compañero.
Un abrazo.