HOLA DICTADURA

Una dictadura no es un concepto... ni un modo de gobierno... ni un vaporoso y oscuro estado mental... una dictadura es algo muy distinto, es algo sólido y concreto, tanto como un barrote, como un ladrillo...

Una dictadura es la mayoría absoluta de unos pocos imponiéndose sobre la minoría de todos los demás, es la búsqueda del poder por el poder mismo, es la criminalización de la razón, es la palabra convertida en ramera, es su represión y sus oprimidos, su corrupción sistémica, su abuso de autoridad, su impunidad... y todo ello convertido en ley.

Una dictadura es esto:

Desde el pasado 19 de Abril la corrupción en España goza de una cobertura legal impensable en cualquier país civilizado... porque desde ese infausto día, todas la unidades de la Guardia Civil han de informar con una semana de antelación a su director general (nombrado directamente  por el gobierno del Partido Popular) sobre cualquier actuación que se vaya a producir sobre sedes oficiales o personas que ocupen un cargo público.

Imagino al ínclito Luis Roldán pensando en estos momentos "¿Cómo no se me ocurriría a mí?"

Y ya van 74 Abriles desde aquél de 1939, aquél del nefasto "Día de la victoria", aquél punto y seguido que continua promulgando edictos y condenas... la tropa que comandaba aquella barbarie mal llamada guerra civil y que hoy comanda esta locura mal llamada crisis, ha conquistado otro de sus objetivos... que no el último.

Ana Oramas, portavoz de Coalición Canaria, ha preguntado en el Congreso de los Diputados por la existencia de una circular de la Guardia Civil en la que se ordena mantener constantemente informado al Director Adjunto Operativo (Cándido Cardiel) sobre qué cargos públicos van a ser objeto de investigación, así como nombre clave de la operación, datos de los agentes participantes, fecha previsible, número de supuestos detenidos e implicados, relación detallada de cargos públicos relacionados o susceptibles de ser relacionados con la investigación...

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha solicitado al Director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, el cese inmediato de Cardiel... pero mucho me temo que eso es tanto como pedir donde no hay.

Y es que Fernández de Mesa no es el máximo responsable de la Guardia  Civil por casualidad... lo es por su dilatada carrera política a saltos entre las Nuevas Generaciones del PP y afortunados puestos de asesor del ministro de turno... lo es por ser un digno representante de los vencedores de aquél Abril del 39... lo es porque sabe perfectamente que la impunidad es la base de toda dictadura... tal vez por ser de Ferrol, como su Caudillo... y en esas anda... en establecer un sistema de preaviso que impida a la justicia llegar donde no debe llegar.

(Nota: Esta imagen corresponde evidentemente a un montaje, Arsenio Fernández nunca estuvo en El Valle de los Caídos)

Si aún queda resto de justicia en eso que llaman leyes, alguien deberá intervenir ante tan flagrante delito, nada más y nada menos que una orden dirigida a romper el secreto de un sumario... la revelación de una información confidencial que solo debe de ser conocida por el propio juez y los agentes encargados de la investigación. No es sólo la dictadura lo que está de vuelta... es esta mezcla de franquismo temprano y maneras del hampa en su versión digital.

Y con todo, bien saben que con esto no bastará, ésta evolución hacia el cleptofascismo necesitará de una mayor cobertura para poder alcanzar sus últimos objetivos, precisará de muchos otros cambios, menores o mayores, que reacomoden sus posiciones entre las instituciones aún no domesticadas... y para eso se pretende una profunda reforma en el código penal según la cual:

La agresión a un ciudadano (incluso si este fuera menor de edad), SEA DE LA GRAVEDAD QUE SEA, por parte de la fuerza pública dejará de ser delito y pasará a ser considerada como falta con la sola justificación de resistencia a la autoridad.

Dicha resistencia a la autoridad implicara la posibilidad de ser condenado a una pena de cuatro años de prisión.

La grabación y divulgación de toda actuación policial pasa a ser catalogada como delito y podrá ser castigada hasta con dos años de cárcel.

La protesta o alteración del orden en el interior de una sucursal bancaria acarreará una pena de hasta seis meses de prisión.

La más mínima interrupción del tráfico en la vía pública conllevará penas de hasta dos años de cárcel.

Toda agresión a un cargo público, ya sea ésta verbal o física, podrá ser castigada con hasta seis años de prisión.

La convocatoria, o difusión de convocatoria, de una manifestación no autorizada acarreará una pena de un año de cárcel.

¡¡Multan con 1000 euros a tres jubilados por trabajar su propia huerta sin contrato!! 

15/01/2013 - José R. Barros, Xeraco, Valencia T.TEINTERESA.ES 

Tres jubilados de un pueblo de Valencia han estado a punto de pagar una multa de 1000 euros. ¿Su delito? Limpiar las cañas secas de su pequeña finca.



Podemos estar tranquilos, esto es España, no es La Habana de Fidel, ni la Argentina de Videla, ni la Corea de Pyongyang, ni el Chile de Pinochet, ni el Moscú de Putin... y tenemos la gran suerte de vivir en democracia. Por eso no es posible que la fuerza del estado se aplique con más severidad sobre los que han sido estafados que sobre los propios estafadores... por eso los ladrones de guante blanco y manos sucias no se pavonean ante las cámaras y son apaleados a la menor ocasión, mientras que los ancianos que han sido despojados de los ahorros de toda una vida son tratados con amabilidad y comprensión... por eso no hay entre la policía ningún miserable cobarde que maltrate a personas indefensas.

Parecía imposible... pero de tanto esforzarse para que la ley no alcance a la justicia... conseguirán que la justicia se adelante a la ley.

De Cospedal advierte: 

“Los que hacen escraches no van al cielo”

etcnoticias.com

Las dictaduras siempre se presentan grotescas y zafias.... como una broma ridícula... hasta que dejan de serlo.